Carlos se estaba enfrentando a una serie de desafíos financieros. La pandemia había acelerado la transición hacia el mundo digital y se sentía abrumado por la presión de adaptarse a la nueva realidad. Empezó a invertir en diferentes oportunidades que parecían prometedoras, pero su falta de conocimiento y estrategia le llevó a experimentar pérdidas.
Su situación financiera se volvió cada vez más incierta. No controlaba sus ingresos, no tenía conocimiento de sus gastos y no ahorraba. Este descontrol llevó a Carlos a buscar una formación financiera. Decidió dar el salto y probar.
Tras el curso, ha aprendido a organizar su dinero, a entender de dónde vienen sus ingresos y cómo se van sus gastos. Ha logrado identificar y eliminar gastos “fantasma” y ahora tiene un conocimiento claro de sus deudas.
Antes no ahorraba nada y ahora tiene una capacidad de ahorro mensual de 1.200 euros al mes. Incluso ha comenzado a pagar deudas y amortizar gran parte de su deuda mala, ahorrándose así una cantidad significativa en intereses.
Lo que más valora Carlos, es la tranquilidad y la paz que le brinda tener todo bajo control. Tiene una estrategia de inversión clara y una visión sobre cómo hacer crecer su negocio y su patrimonio.
Carlos nos lo resume de la siguiente manera: “Este es el mejor dinero que he invertido nunca en una formación.”